Durante el paso migratorio no es dificil el observar concentraciones de garcetas grandes en las salinas de Chiclana (Cádiz) y verdaderamente son un espectáculo el comprobar como se reúnen centenares de ellas en las aguas someras de los esteros donde buscan peces que se llevarse a su buche.
No solo podemos ver concentraciones de esta enorme garceta, sino que además también se juntan otras tantas de las garzas reales que se diferencian además de por su color grisáceo, por su menor tamaño.
Es asombroso el observar tantas ardeidas juntas y compitiendo por el alimento, si a ello le añadimos grupos de espátulas que incansablemente escrutiñan las aguas de los esteros, conforman un espectáculo pajarero de primer orden.
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