Un invierno acuoso y una primavera soleada son los ingredientes que necesita Doñana para que una zona accesible a todo el mundo se convierta en un autentico espectáculo natural. Son las pajareras de Cerrado Garrido que desde el Centro de Visitantes José Antonio Valverde se pueden observar.
Es increible como a tan solo unos metros del centro se encuentran tarajes repletos de nidos de todo tipo de ardeidas y moritos. El ir y venir de aves es sensacional llevando comida a sus nidos, aportando material o simplemente dando "el relevo" para incubar.
Cangrejeras, garzas imperiales, garzas reales, garcillas bueyeras, moritos, .... se apilan unos sobre otros pareciendo uno de esos edificios donde los humanos nos acumulamos unos sobre otros.
Ya os he comentado en otras entradas que Doñana es inigualable por lo que se puede observar y desgraciadamente no todo está a la vista de cualquiera, pero esta ocasión es única podemos acceder a un lugar donde ver un espectáculo a muy pocos metros. Aves en cantidad y calidad. Para ir hay simplemente buscar el Centro de Recepción José Antonio Valverde en Doñana, no despreciar los carriles que acceden a el ya que siempre nos llevaremos agradables sorpresas pajareras.
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