Medina Sidonia, Balcón de la Bahía de Cádiz

Si hablamos de un pueblo blanco situado en lo alto de una colina, con bonitas vistas hacia la Comarca de la Janda, la Campiña Jerezana y la Bahía de Cádiz, no tiene confusión posible se trata de Medina Sidonia. Un lugar en el que dar un paseo es más que agradable y que en los últimos años está desarrollando un turismo cultural y gastronómico muy cuidado.

Un paseo por alrededor de su bien cuidado casco histórico nos llevará a conocer rincones evocadores de distintas épocas históricas que han sabido poner en valor.

Antiguas defensas de la ciudad que sirven ahora de adornos.

Alrededor de la Iglesia Mayor se aglutinan la gran mayoría de lugares visitables y conviene recorrer sus calles adyacentes desde las que disfrutaremos de distintas perspectivas.

Es aconsejable acudir a Medina durante la semana que en diciembre de cada año abren todos los monumentos visitables para que puedan ser admirados por los visitantes. Además se acompaña de una gastronomía basada en productos del campo que cada vez tiene más admiradores. 

Totalmente recomendable una visita, un buen paseo y unas buenas tapas para reponer fuerzas.

El Charrancito, un pequeño gran pescador.

Un visitante estival de nuestra Bahía de Cádiz es el Charrancito, Sternula albifrons, que todas las primaveras acude a estas tierras salineras para reproducirse. Su reclamo, kit, kit, kit, su pequeño tamaño, y sobre todo la forma en la que se sostiene en el aire antes de hacer un picado hacia el agua, lo hacen inconfundible. 

Y es que su forma de conseguir el alimento es todo un espectáculo, vuela por aguas poco profundas en busca de pequeños alevines de peces a los que localiza con su buena vista, se cierne y se deja caer sumergiéndose en el agua y saliendo con el pez en la boca.

Está especializado en charcas y estanques, por ellos es muy habitual el verlos en los cercados de nuestras salinas, además cría en esas zonas salineras simplemente rodeado de algún montoncito de pequeñas piedras y conchas que acumula alrededor de los huevos.

Laguna de Tarelo. Sanlucar de Barrameda

Para los amantes de la ornitología la zona de Sanluncar de Barrameda es sin lugar a dudas un sitio donde pasar un excelente día de "pajareo". Hoy os propongo que nos acerquemos a la Laguna de Tarelo, justo a la entrada del Pinar de la Algaida se encuentra esta coqueta lamina de agua.

Llegaremos siguiendo las indicaciones de Bonanza y la Algaida por una pequeña carretera que pasa por estas barriadas, al final se encuentra la entrada a este hermoso pinar y justo ahí dejaremos el coche ya que la laguna está a pocos metros.

En escasos cinco minutos llegaremos al observatorios, que anteriormente era un chozo pero que unos desaprensivos le prendieron fuego y ahora tan solo tenemos unos parapetos que nos sirven para que las aves no nos vean. Con ello estaremos expuestos a las inclemencias del tiempo, calor, frío, agua, etc.

Cuando enfoquemos nuestros prismaticos y canutos hacia el agua veremos justo enmedio una isla que se ha convertido en una explendida pajarera donde anidan espátulas, y todo tipo de ardeidas (garzas reales, bueyeras, comunes, cangrejeras, etc).

Las anatidas también están presentes aunque es en invierno cuando más podremos observar.

Si nos apetece podremos hacer algún que otro sendero por medio de este pinar, para hacer un poco "de hambre" y poder degustar unos buenos bocadillos cobijados por la sombra de los pinos.

Luarca, Asturias

A 92 kilómetros de la capital del Principado de Asturias, se encuentra esta bella localidad, enclavada entre el mar y la montaña en pleno occidente asturiano. Es la capital del Consejo de Valdes y bien merece una visita y un buen paseo por su casco urbano.

Recomendamos el buscar aparcamiento por la zona final del puerto pesquero frente a la playa, es la mejor opción ya que el casco urbano esta un tanto saturado de tráfico.

A partir de ahí podemos andurrrear hasta el puerto pesquero y deportivo.

La zona está llena de buenos restaurantes acomodados a las distintas posibilidades económicas. Son muy buenos y baratos los distintos menús basados en la gastronomía propia del lugar que como no puede ser de otra forma están basados en productos tanto del mar como de la tierruca.

Os recomiendo que subáis a un mirador que existe justo encima de la zona portuaria y al que se accede o bien en coche o bien  tras unos cuantos cientos de escalones por el típico barrio de la pescadería. Desde el mismo tenemos unas vistas inmejorables de el puerto y la zona urbana.

El Ibis Eremitas continua su expansión en Cádiz

Es un autentico placer el comprobar como el Ibis Eremitas, reintroducido en la provincia de Cádiz después de cientos de años en los que no estaba, se expande de una forma admirable por distintos cortados todos cercanos a la zona donde se han criado en cautividad (la Sierra del Retín en Barbate).

Si queréis verlo podéis hacerlo en la Barca de Vejer, junto a la zona de ventas que hay allí este año se han instalado más nidos y en más lugares. Todos a muy baja altura y sin que se molesten por el constante paso de coches que hay en la zona.

Tan solo falta que desde la Administración pertinente se habilite alguna zona donde los observadores de tan bello espectáculo puedan hacerlo sin poner en riesgo su vida. Ahora mismo hay que hacerlo al filo de la carretera y no creo que esto sea lo mejor. Se debería hacer algún mirador y además poner carteles explicativos de la maravilla que podemos contemplar. Es una forma por un lado de poner en valor un atractivo para el turismo ornitológico, organizar un poco la "visita" a los Ibis y salvaguardar la integridad física del observador. Esperemos que no tenga que pasar alguna desgracia para que esto se haga.

Para acceder al lugar hay que recorrer la nacional 340, y tomar el desvío hacia Barbate y a unos 500 metros nos encontramos con una zona de ventas donde hay un gran aparcamiento a la izquierda. Hay dejamos el coche y en pequeños cortados que hay al otro lado de la carretera tenemos a estos "feos pajarracos".

La Jara Pringosa (Cistus ladanifer)

Es ahora en primavera cuando la jara pringosa (Cistus ladanifer) está en flor y presenta un maravilloso aspecto. Este arbusto puede llegar hasta los 2,5 metros y  si queremos saber el porque del nombre de pringosa tan solo tenemos que tocar sus hojas y comprobar como nuestros dedos quedan impregnados de una sustancia pegajosa.

Su presencia indica que el suelo es pobre y suele conquistar grandes zonas de terreno, en ella encuentran refugio grandes ungulados, jabalies, etc. Su madera es muy apreciada para el uso de cabos de herramientas de labor.

Son piroplásticas, es decir cuando una zona se quema sus semillas se reparten (explosionan) por todas partes inundando las zonas afectadas y reconquistando ese terreno quemado. Por ello ante cualquier terreno quemado ellas son las que primero aparecen.

Santuario de Covadonga

En pleno Parque Nacional de los Picos de Europa nos encontramos con este Santuario que es objeto de peregrinación de miles de creyentes y no tan creyentes que o bien van por cuestiones religiosas o a disfrutar de un entorno natural envidiable. En plena subida a los Lagos de Covadonga y a unos 11 kilómetros de Cangas de Onis tenemos enclavado esta basílica con un color rosado ya que fue construida con la misma piedra de la montaña.

Covadonga significa Fuente de la Cueva y muy cerca de la basílica tenemos la Santa Cueva donde poder ver la imagen de la Santina. No es raro que haya que guardar cola para acceder a la misma.

El lugar está impregnado de naturaleza, historia y sentimientos religiosos, y a el acuden miles de personas que si vamos en temporada estival se verán multiplicados por no se cuanto.

Acantilados de Conil, la Escocia del Sur

El trozo de costa entre el pueblo de Conil y su puerto pesquero es más parecido a la costa escocesa que a una playa de la costa gaditana. Indudablemente esta es mucho más bella que las tierras del norte ya que aquí la luz, el sol  y las extensas playas hacen que podamos disfrutar de paisajes tan idílicos como estos.

Si nos acercamos a alguno de los miradores que existen a partir del hotel Flamenco podremos observar desde arriba de los cortados por un lado el Faro de Roche con el puerto pesquero a sus pies...

...y hacia el otro lado la playa de la Fontanilla, alcanzando la vista hasta la de Castilnovo e incluso el Faro de Trafalgar. Incluso en días claros podemos ver las costas africanas de forma nítida hasta Cabo Espartel.

No puede acabar la jornada sin disfrutar de un paseo por la playa aprovechando las numerosas bajadas que nos acercan hasta el mar.

Para llegar a esta zona debemos de, una vez entrado en Conil, tomar dirección hacia la zona de hoteles, Fuente del Gallo, como referencia el Hotel Flamenco y a partir de ahí cualquier calle nos llevará hasta miradores naturales desde los que poder otear toda la zona.

Canuto del Risco Blanco. Los Alcornocales

El Valle de Ojen, en pleno Parque Natural de los Alcornocales es un lugar idílico para los senderistas y practicantes de la bicicleta de montaña. Pero tiene un recorrido por uno de sus múltiples "canutos" que recorre el del Risco Blanco. La entrada la podemos realizar tanto desde Facinas como desde la autovía Jerez- Los Barrios, es más recomendable la primera opción ya que se encuentra en mejor estado el carril.

Justo un poco antes de inicio del sendero del Arroyo de San Carlos del Tiradero se encuentra señalizado el comienzo.

Comenzamos con una subida corta pero fuerte y entre un magnífico bosque de quejigos.

Dicho sendero no podría llevar a hacer una ruta circular si seguimos por la pista central hasta aparecer a la carretera de acceso por la que hemos llegado. Saldríamos un poco más adelante del comienzo de la ruta y deberíamos de volver por dicha carretera al inicio del sendero.

Podemos optar, lo más sensato, por seguir las señales del camino que nos indican un desvío tanto a derecha como a izquierda por el que nos adentramos en la espesura de dicho canuto.

Es muy frecuente que nos sobrevuele el buitre leonado que en los cercanos cortados tiene lugares de cría.

Como no el alcornoque está presente en toda esta ruta.

Las vistas desde lo más alto del recorrido pueden llegar a extenderse hasta las sierras que rodean al Campo de Gibraltar, e incluso se puede observar el Peñón.

El tiempo del recorrido estará en función de las distintas opciones que presenta ya que podemos adaptarlo a las necesidades del momento o la compañía que llevemos. Es muy recomendable el ir en silencio ya que la zona es abundante en aves de bosques y animales que podemos observar si no armamos mucho jaleo. 

Esto puede ser incompatible cuando llevamos niños aunque el sendero se adapta muy bien a estos pequeños "bichitos con dos patas".