Ahora que todo el campo nos lo tienen vallado con espinos es bueno recordar que antiguamente en el Parque Natural de Los Alcornocales los terrenos se lindaban con muros de piedra que la tierra daba y tenían la peculiaridad de que estos se construían en seco. Es decir que no se utilizaba ningún material para aguantar unas piedras sobre otras.
Eran auténticos paereros que sabían de su trabajo como nadie y todavía hoy día podemos disfrutar de algunos ejemplos de estas vallas que se encuentran medio derruidas y que deberían de ser objeto de alguna protección por parte de las autoridades del Parque Natural.
Algún alcornoque se ha colado entre las piedras, el musgo las recubre en los lugares mas umbríos y los ombligos de venus crecen verdes intensos. Ademas sirven de refugio para reptiles, aves y otros animales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario