Afortunadamente cada vez más los pajareros comprobamos como nos vamos concienciando, la ciudadanía en general, de los muchos beneficios que el medio ambiente puede reportarnos e incluso avanzamos en muchas cuestiones. Una de ellas es la protección de los cables electricos que, cada vez más, atraviesan extensas zonas de campeo importantísimas para la conservación de las aves.
Una de ellas es la antigua Laguna de la Janda y en ella tuvimos la oportunidad de fotografiar esta lamentable imágen en la que vemos un ala de una rapaz (seguramente) que había quedado enganchada en un artilugio que se coloca para evitar que tengan accidentes en estos cables eléctricos. Se llaman concretamente "Salvapájaros de hélice completa", paradogicamente se llama salvapájaros algo que le ha producido la muerte a un ave. Y es que hay que ser más responsable a la hora de colocar estos aparatos y hacerlo de una forma correcta. No se puede dejar ningún espacio donde se pueda enganchar el animal, si no realmente no estamos protegiendo... estaremos condenando.
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