La conjunción de visitar un pueblo precioso y bien conservado y poder además pasar un buen día de campo en un entorno natural envidiable por el Parque Saja-Besaya, Cantabria, se dan cuando visitamos el pequeño pueblo de Barcenas Mayor.
Debemos dejar el coche en un parking habilitado a la entrada al pueblo, ya que a este solo pueden pasar los residentes, una medida que nos parece perfecta.
Allí nos recibe un petirrojo que busca comida entre los visitantes, cada vez son más descarados y con menos verguenza.
Un camino empedrado nos conduce al pueblo y pronto comenzaremos a ver una autentica exposición, más que un pueblo bien cuidado, todo parece puesto y expuesto para ser admirado por los miles de visitantes que recibe esta población, sin llegar a saturarse. Al menos cuando nosotros fuimos en septiembre y un día entre semana. Seguramente en pleno verano será un poco agobiante.
Tendremos ocasión de admirar las casas montañesas, con soportales abiertos, cerramientos de madera, la parte de solana, adornos y antigüedades en una exposición constante de elementos antiguos.
Y por si fuera poco está en un entorno natural envidiable, rodeado de bosques y agua por doquier.
Una vez que visitemos el pueblo podemos tomar alguno de los caminos o senderos que parten o pasan por el pueblo y recorrer sus preciados bosques donde admirar robles, castaños, perales silvestres, robles, hayas, acebos, etc.
Nosotros tomamos la ruta hacia Ozcaba y nos acercamos hasta un primer collado desde el que tenemos preciosas vistas de todo el valle.
Y luego lo mejor, el regreso al pueblo a la hora de comer para poder disfrutar de un fenomenal cocido montañés y poder reponer las fuerzas consumidas en la caminata. Hay gran varios restaurantes y lo aconsejable en época de puentes y veraneo es el reservar mesa para la vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario