Sus colores amarillos y negros son los que le dan sentido al sobrenombre de araña tigre a la Argiope lobata, aunque también le podría venir dado por la capacidad de caza que tiene gracias al veneno que inocula en sus víctimas.
Las telas que fabrica son muy resistentes y suelen hacerla entre dos plantas cercanas, llegando a superar el metro de diámetro. Debemos de mostrarnos cautos ante ella ya que si bien su veneno no llega a ser mortal (salvo casos excepcionales) si que su picadura produce gran dolor.
Es frecuente observarla en las salinas de la Bahía de Cádiz y zonas cercanas a ella y llama mucho la atención el claro diformismo sexual que presenta, siendo la hembra mucho mayor que el macho.
No hay comentarios:
Publicar un comentario